El gobierno del actual presidente en funciones, Pedro Sánchez, había previsto para el mes de julio una bajada del paro que situara el número de personas sin trabajo por debajo de los 3 millones, algo que lleva siendo deseado por la población des del 2008. Desgraciadamente, no ha sido así, y el número actual sobrepasa por unos cuantos millares esa cifra. .
El número de parados el mes de julio fue, concretamente, de 3.011.433, y se había reducido en 5175 respecto al mes anterior. Eso supone un descenso del 0’17%, la baja del paro intermensual correspondiente al mes de julio más baja en 10 años. Esta disminución representa una un 0’14% menor que la del mes anterior, lo que resulta una desaceleración preocupante (según datos del Ministerio de Trabajos Migraciones y Seguridad Social).
Esto resulta un dato alarmante, ya que el mes de julio siempre se ha caracterizado por ser benevolente con la cifra de parados. La popularidad turística de España en verano gracias a su oferta del famoso turismo mediterráneo de “sol y playa” solía favorecer las cifras gracias a las contrataciones temporales de sectores como la hostelería y otros servicios donde la llegada masiva de turistas significaba un aumento de trabajo importante. Por eso mismo ,desde que se tienen registros, el paro ha bajado en este mes un total de 20 veces, ascendiendo solo en 3 ocasiones (2005, 2007 y 2008, los tres años en los que la crisis se encontraba en su auge).
Pese a la desaceleración padecida, sin embargo, el descenso respecto al año pasado nos incita a ser optimistas, pues desde el mismo mes del 2018, la cifra de personas sin empleo ha descendido en más de 120.000, lo que significa una disminución del 3’94%.
Si nos fijamos en los datos más específicos, veremos que, a día de hoy, el sector femenino de la población de parados ha sido el más favorecido por este descenso, pues han sido 2.684 las mujeres que han conseguido trabajo este verano frente a los 1.569 varones, dejando el número de desempleados en 1.79 millones de mujeres y 1.21 millones de hombres. Si vamos a las franjas de edades, podremos observar que los jóvenes han sido, como era de esperar, quienes más se han beneficiado de los meses doradas de la contratación temporal, siendo más de un 90% de los contratados personas de una edad igual o superior a los 25 años.
Así pues, pese a esta desaceleración, los datos no se han desviado demasiado de las previsiones, brindándonos un paro menor al del año pasado pese a todo y ofreciéndonos la perspectiva de un futuro con menos gente en la situación del desempleo.