En España ya existe un lugar para poder llevar a cabo la recarga ultrarrápida en coches eléctricos, que se efectúa en solo seis minutos. La marca de la estación de servicio es Repsol, una marca muy comprometida con la sostenibilidad. Repsol apuesta por la movilidad eficiente, no sólo por la instalación de este punto de recarga ultrarrápida, sino que también cuenta con una parte de Wibe, una empresa de carsharing y de Scutum, que suministra a empresas de motosharing. Tal como indican en su web, desde Repsol impulsan y aplican planes de sostenibilidad para reducir la intensidad energética de carbono y apuestan por la eficiencia energética, para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
El primer punto de recarga ultrarrápida en España para coches eléctricos
Se trata de la primera electrolinera de carga ultrarápida en España que está en funcionamiento y está ubicada en el término alavés de Lopidana, cerca de Vitoria. Es el único punto de recarga ultrarrápida en toda España que permite cargar un coche eléctrico en tan solo seis minutos, el mismo tiempo que tarda un vehículo convencional en repostar.
Una nueva instalación que ha sido impulsada por Repsol y el Ente Vasco de la Energía (EVE), que cuenta ya con cuatro postes que soportan una potencia máxima de 700 kilovatios. Es apta para que los vehículos puedan recorrer entre 150 y 200 kilómetros de distancia y está preparado para dar servicio a cualquier tipo de vehículo eléctrico del mercado, porque dispone de conectores estándar de recarga Combo CCS y CHadeMO. La instalación está diseñada para poder enchufar 350 kilovatios a dos vehículos al mismo tiempo o recargar cuatro turismos con 175 kilovatios cada uno.
El coste de cada carga completa es de ocho euros y cuenta con una potencia máxima de 700 kilovatios, que puede repartirla entre sus cuatro puntos de suministro dependiendo de la capacidad de carga de los vehículos.
Una electrolinera singular situada en un punto estratégico
La electrolinera está situada en un lugar privilegiado de la carretera N-I, a 130 kilómetros de la frontera con Francia y a 330 km de Madrid, lo que permite a los coches eléctricos hacer trayectos entre Madrid y Francia con una sola recarga. Esto quiere decir que estamos hablando de un gran avance para favorecer el uso del vehículo eléctrico, como medio de transporte interurbano.
A este punto de recarga ultrarrápida le seguirán cuatro instalaciones muy parecidas que irán ubicadas en los ejes de la A-1 (Madrid-Irún) y en la A-2 (Madrid-La Junquera), que contempla el despliegue de una gran red piloto de 14 instalaciones semejantes, en corredores europeos de transporte de España, Francia e Italia.