Conviene ir revisando la tubería eléctrica siempre, pero sobre todo si ves señales claras, por ejemplo, en el caso de que salte el diferencial de forma frecuente y solo ocurra en tu vivienda. En ese caso, deberás revisar si es necesario cambiar la instalación o cuál es el motivo, porque puede que esté defectuosa y eso va a acarrearte muchos problemas a corto o largo plazo.
Reforma integral, el mejor momento para revisar o cambiar la tubería eléctrica
El mejor momento para cambiar la tubería eléctrica o las cañerías es cuando se realiza una reforma integral. Es un momento perfecto, porque la casa está vacía, se hace desde cero y se pueden realizar, cómodamente, todos los cambios que sean necesarios. Así, evitarás problemas y averías en un futuro en tu tubería eléctrica.
Si vas a hacer una reforma integral de un domicilio o una casa que tiene ya unos años, es recomendable pensar en la edad de las instalaciones eléctricas y las tuberías de agua, sobre todo si no eres su primer dueño y no sabes si han cambiado en alguna ocasión. Si calculas que tienen entre 15 o 20 años, ya es recomendable empezar a cambiarlas.
Si una tubería está rota o agujereada, puede mojar el techo de tu vecino y el tuyo. De hecho, si tu instalación eléctrica está defectuosa, puede dejarte sin luz unos cuantos días o hasta causar un incendio o estropear alguno de tus aparatos domésticos. Si tu instalación eléctrica tiene más de 30 años, es probable que toque cambiarla, no solo por el paso del tiempo, sino porque no suelen estar preparadas para soportar todos los dispositivos y aparatos que conectamos a la red y el tipo de componentes que se utilizaban ha cambiado.
Todo ha cambiado para ser más seguro y, ahora, la tubería eléctrica está completamente preparada para evitar riesgos que antes no se habían contemplado. Se utilizan tubos y cables que son ignífugos, sin halógenos, de modo que no conducen el fuego y eso reduce las posibilidades de que se produzca un incendio causado por un chispazo. Además, las instalaciones eléctricas de hoy en día, cuentan con mecanismos de seguridad y protección pensados para evitar, también, las averías de los aparatos que se conectan a la red.
Durante la reforma integral puedes aprovechar para cambiar la tubería eléctrica y su distribución; instalar una grifería nueva, cambiar un enchufe por otro, cambiar la ubicación de los radiadores para aprovechar más el espacio disponible…
En una construcción lo más habitual es que los cables de la instalación eléctrica se oculten y protejan dentro de tubos rígidos o flexibles, pero todo va a depender del tipo de instalación, de si es interior o exterior, o bien de si va a ser empotrada en la pared o en una superficie.